Así es trabajar con Hayao Miyazaki una leyenda de la animación
Estudios Ghibli es uno de los estudios de animación más queridos en el mundo. La mezcla de anime con decenas de historias hermosas, hacen que los fans esperen con emoción la siguiente película de Hayao Miyazaki. Por eso no es una sorpresa que muchos artistas sueñen con poder trabajar alguna vez en el lugar que nos dio algunas de las mejores películas de animación.
El pintor Steve Alpert tuvo la oportunidad de trabajar directamente con Hayao Miyazaki como jefe de ventas internacionales de Studio Ghibli y escribió en sus memorias la experiencia. Alpert lleva 15 años en Ghibli, así que conoce perfectamente los métodos de Miyazaki.
En estas memorias, que Ghibli se encargó de revisar detenidamente, habla sobre la manera de trabajar de uno de los más grandes estudios de animación de nuestros tiempos. Ahí menciona que hacer películas de Miyazaki es exactamente como cualquiera se imaginaría: estresante.
Las Expectativas
No sólo porque el ritmo de trabajo es especialmente exigente, sino que además, el creador de las mejores películas de animación japonesas, quiere que los empleados estén a la altura. Es por esto, que él constantemente está ideando maneras de hacer a sus artistas mejores, tal como escribe Alpert:
“A menudo decía que una persona solo hace su mejor trabajo cuando se enfrenta a la posibilidad real de fracaso y sus consecuencias reales. Varias veces después de la finalización de una de sus películas, Miyazaki sugirió que se cerrara el estudio y se despidiera a todo el personal. Pensó que esto les daría a los animadores una idea de las consecuencias del fracaso y los haría mejores artistas si fueran contratados para la próxima película.”
Alpert también habla sobre la manera en que Miyazaki ve los proyectos finalizados: una vez que terminó la producción de una de sus películas, decide no volver a verla ni pensar en ella. Para Miyazaki una vez que está lista, no hay nada más que se pueda hacer para cambiarla o mejorarla, así que ese es el momento de ver hacia adelante y pensar en la siguiente película.
Proceso Creativo
Pero el proceso creativo para hacer algunas de las mejores películas de animación de Ghibli, no consta sólo de estrés. A Miyazaki le gusta plasmar las imágenes e ideas que vienen a su imaginación en bocetos y dibujos a acuarela.Cuando tiene una cantidad considerable de dibujos, aunque se traten de diferentes historias, comienza a trabajar sus tramas.
Hayao Miyazaki también suele apoyarse de su productor, Toshio Suzuki, para discutir las posibles historias. Suzuki es un gran amigo de Miyazaki y han trabajado juntos en prácticamente todas las películas de Ghibli. Una vez que ellos dos deciden irse por alguna idea, se la cuentan a otras personas del estudio para ver sus reacciones. Sin embargo, de acuerdo con Alpert, una semana después esta idea será descartada por otra completamente diferente.
Después de pelotear varias ideas de esta manera, llega una que se mantiene en la mente de los realizadores. Otros artistas de varios estudios de animación son contratados para completar el arte conceptual de la película basándose en los dibujos más elaborados de Miyazaki. Finalmente, el estudio anuncia la película y la producción comienza, dos años antes de que la película se estrene.
De acuerdo con Alpert, este proceso suena muy sencillo para lo que en realidad es. Y es que todos los que participan en Ghibli, saben que una vez que se anuncia una película de Miyazaki, se espera que sea una de las mejores películas de animación del año. Es por eso que el proceso es muy intenso y se realiza bajo un riguroso escrutinio.
Proceso de Producción
Cuando la producción comienza, el ritmo es mucho más lento de lo que se esperaría. Miyazaki trabaja en guiones gráficos a los que Ghibli llama ‘econtes’. Un econte es la combinación de guion gráfico y guion, el cuál sirve de base para comenzar a hacer la película.
Miyazaki divide el econte en cinco partes diferenciadas por letras (A, B, C, D y E). Cada letra se puede tomar como si fuera un acto, y representa el 20% de la duración aproximada de la película.
Por lo general, Miyazaki tiene que tener preparadas las partes A y B en su cabeza antes de que la película se anuncie. Y una vez que la producción inicia, se toma su tiempo para dibujar con detalle (usualmente a acuarela) estas dos primeras partes.
En cuanto Miyazaki comienza a dibujar la Parte C, la película empieza por completo la producción. Todos los artistas encargados del fondo, composición y la animación, comienzan a trabajar.
Mientras Miyazaki está terminando de escribir el guion de la película y está empezando la Parte D, se reune con animadores para revisar el trabajo. Alpert cuenta que es usualmente durante esta etapa que Miyazaki comienza a cuestionarse si la duración que habían considerado al principio sería suficiente. Para este punto, él sigue sin tener el final escrito.
Alpert describe este momento como una sensación de crisis inminente. Uno de los mejores estudios de animación de nuestros tiempos, empieza a entrar en pánico. Eventualmente, Toshio Suzuki se entera de esto y asiste al estudio para tratar de calmar las cosas.
Sin embargo, para este punto, la parte E de la película aún no tiene econte. Los cines ya estarían reservados, pero la producción atrasada… igual que la película anterior y la anterior a esa.
Después de un periodo de euforia, aparece la parte E y el personal de Ghibli empieza a trabajar horas extras para poder terminar la película. Alpert describe este momento como el más solidario, pues tanto el equipo de producción como los artistas animadores se quedan horas extras a pesar de no tener trabajo para llenar ese tiempo, permanecen con el equipo que sí tiene que quedarse.
Estreno
Una vez que la película está lista, Miyazaki viaja por todo Japón para reunirse con los dueños de las salas de cine y la prensa local. Después de la gira, se toma un mes de descanso y se retira a su casa en las montañas junto con su familia. Pero ese tiempo le servirá para ir pensando en las nuevas ideas que lo llevarán a hacer su siguiente película.
El genio detrás de Ghibli
Durante un tiempo, el estudio aceptaba visitas al estudio. La gente que iba podía ver a los animadores desde una ventana y a veces, también Miyazaki se encontraba entre los animadores trabajando en cualquiera de los escritorios disponibles.
Después de un tiempo, el estudio decidió cerrar sus puertas, sin embargo, abrieron un increíble museo para mostrar las mejores películas de animación y sus procesos.
Aunque es cierto que Hayao Miyazaki tiene un proceso de trabajo bastante rudo y exigente, también hay que aceptar que sus películas no tienen igual; y esto se debe a la dedicación y al nivel de involucramiento que el realizar invierte en cada una de ellas. No por nada, Ghibli es uno de los mejores estudios de animación de nuestros tiempos.